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Prótesis. Tinnitus

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    Tinnitus

    Emilio Hinojosa Carrión
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    Tinnitus es una enfermedad. Tinnitus es un sonido que perdura. Lo extraño es que en realidad nada está sonando. Es sólo un mancha parecida a una mosca vista de reojo. Es la perturbación antes de que el sonido llegue. La temporalidad de la psique enloqueciendo nuestro aparato.

    Un tratamiento ante el tinnitus consiste en escuchar una regadera durante seis horas, sin interrupción, hasta lograr que desaparezca el sonido que creemos percibir.

    ¿Se escucha acaso el tinnitus?

    Tinnitus son los hertzios que dejamos de percibir con el tiempo, pero parecen presentes. Quizá sólo son parte de un pasado que no duele.

    ¿Nos hemos deprimido por todos los puntos hetrzios que ya no escuchamos?

    ¿Dónde queda la verdadera nostalgia del cuerpo?

    ¿Dónde quedan las atmósferas perdidas, los rechinidos de una cama de acero, las clavijas, los intentos por querer decir algo en un lenguaje que siempre ha sido propio, a través del cual la resonancia es nostalgia?

    Tinnitus debe tener una razón de ser. Un motivo que justifique que se le llame enfermedad, el malestar de oír de forma permanente un sonido. Todos hemos experimentado ese zumbido. Todos hemos escuchado el gran mundo de los puntos hertzios que vamos olvidando hasta que forman una coladera hermosa de cosas inaudibles.

    ¿Dónde están los puntos hertzios de lo niños?

    El tímpano cicatriza. Se produce tinnitus.

    Tinnitus existe. Tinnitus tiene su razón de ser. Es fácil decir que escuchas algo cuando nada está sonando; es más facil enloquecerse cuando escuchas algo que ni siquiera suena. El sonido perturba lo que conocemos por sonido.

    Tinnitus debe tener una razón de ser. Tinnitus no es sólo un sonido que no existe. Tinnitus se trata de poner en juego lo que creíamos que es el sonido.

    Tinnitus suena, hasta cierto punto, como el brazo amputado que aún nos despierta sensaciones, esa cosquilla que recuerda lo que ya no existe.

    Ésta es la manera en la que se concibe el cuerpo.

    Tinnitus es ofrenda. Ofrenda a los pedazos perdidos, a los pedazos que también llamamos sonidos —que alguna vez escuchamos pero que no son recuerdos.

    ¿La infancia está en los sabores o en los sonidos? No lo sé. En cambio estoy convencido de que la vida adulta es la pérdida de eso, una extravío profundo que despierta la nostalgia.

    Perder es ensordecerse.

     

    http://vanosonoro.com/tinnitus/